El camino hacia ciudades inteligentes: evolución tecnológica y urbana
Eylin Danae Flores Osorio

En un mundo cada vez más interconectado y tecnológicamente avanzado, el concepto de ciudades inteligentes se presenta como un punto de referencia clave para el cambio y la transformación en la manera en que concebimos y experimentamos la vida urbana. Un reciente estudio realizado por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y la Universidad Autónoma de Aguascalientes, México, destaca que este cambio no solo redefine la estructura física de nuestras ciudades, sino también la dinámica social y cultural que las impulsa. A través de la integración de la tecnología y la información, las ciudades inteligentes son clave en la búsqueda de una mejor calidad de vida para las sociedades, además de promover la sostenibilidad ambiental y la inclusión social. Es crucial comprender el papel fundamental que desempeñan las innovaciones tecnológicas, especialmente en la forma en que las sociedades interactúan con Internet y cómo esta interacción moldea la transformación de nuestros entornos urbanos hacia una mayor eficiencia, sostenibilidad y habitabilidad.

En primer lugar, es fundamental reconocer el papel central que desempeñan las ciudades como motores del conocimiento en la era contemporánea. Según el estudio, la intensificación de la urbanización desde mediados del siglo XX ha establecido a las ciudades como el centro del desarrollo y el crecimiento económico. Sin embargo, la urbanización también ha generado desafíos significativos, como la contaminación, la escasez de recursos y la saturación del tráfico. Es en este contexto donde las ciudades inteligentes se destacan como una respuesta innovadora para abordar estos desafíos mediante la integración de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para mejorar la calidad de vida y la eficiencia de los servicios urbanos.

La conexión entre Internet, innovación tecnológica y desarrollo urbano es innegable. El estudio señala que Internet se ha convertido en una herramienta esencial para las ciudades inteligentes, permitiendo la recopilación, procesamiento y análisis de datos en tiempo real. Esta interconexión no solo facilita la gestión más eficiente de recursos como la energía, el agua y el transporte, sino que también impulsa la creación de soluciones inteligentes para abordar problemas urbanos complejos.

La transformación hacia ciudades inteligentes también implica un cambio en la forma en que las personas interactúan con su entorno urbano. Desde sistemas de transporte inteligente hasta servicios de salud y educación digitalizados, las ciudades inteligentes ofrecen una amplia gama de soluciones tecnológicas diseñadas para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Además, la inclusión digital y la alfabetización tecnológica son elementos fundamentales para garantizar que todos los segmentos de la población puedan acceder y beneficiarse de las oportunidades que ofrecen las ciudades inteligentes.

En México, el avance hacia ciudades inteligentes se puede observar en ciudades como Maderas (Querétaro), Tequila (Jalisco), Guadalajara (Jalisco) y Puebla. El estudio destaca que estas ciudades están adoptando tecnologías innovadoras para mejorar la calidad de vida y la sostenibilidad. Maderas, Querétaro, se destaca como una ciudad industrial y tecnológica que prioriza el factor humano en su camino hacia la inteligencia urbana. La Ciudad de México ha progresado en iniciativas de inclusión digital desde el 2000, estableciendo puntos de acceso a internet y promoviendo leyes para su transformación en ciudad digital y del conocimiento. Además, ciudades como la Ciudad de México, Querétaro, Puebla, Tequila y Guadalajara se han unido a la promoción de proyectos integrales y al uso de nuevas tecnologías en sus entornos urbanos.

El estudio concluye que la evolución hacia las ciudades inteligentes impactará significativamente la forma en que percibimos y experimentamos la vida urbana. Sin embargo, para lograr el pleno potencial de las ciudades inteligentes, es crucial continuar promoviendo la innovación tecnológica, la educación y la alfabetización digital. Además, es necesario impulsar un marco legal favorable, involucrar al sector privado y fomentar la interoperabilidad de datos. Internet y las tecnologías de la información juegan un papel central en este proceso, permitiendo una gestión más eficiente de recursos y una mejora sustancial en la calidad de vida de los ciudadanos.

Referencias

[1] M. G. Alcalá Casillas y C. A. Granados Macías, "Ciudades Inteligentes en la era del Conocimiento", Derecho Global, vol. 9, n.º 26: Marzo-Junio, pp. 133–157, mar. 2024. https://doi.org/10.32870/dgedj.v9i26.443