Agua en la región Paso del Norte (PdN): futuro y retos.
Dr. Alfredo Granados Olivas (IIT-UACJ) y Dr. Alexander “Sam” Fernald
(NMWRRI).
Introducción
El agua es el recurso natural más importante para la supervivencia del ser humano. Las diversas
actividades que se desarrollan para alcanzar la calidad de vida en las sociedades están entorno a la
disponibilidad de agua, tanto en calidad como en cantidad. Contar con suficiente agua de buena
calidad
es clave para que las sociedades prosperen y mejoren sus condiciones de vida. En México, la Ley de
Aguas
Nacionales (LAN) establece que el uso doméstico representa la primera prioridad en derecho de acceso
al
agua; esto es, antes de los usos agrícolas, industriales, mineros o ambientales, las personas tienen
prioridad. Por otro lado, los datos proporcionados por las autoridades responsables de la
administración
del agua establecen que el país tiene una cobertura nacional promedio de suministro de agua potable
para
las comunidades de aproximadamente 92 %. Esto es, a nivel nacional, aproximadamente 9 de cada 10
personas tienen alguna forma de suministro de agua potable [1]. Sin embargo, las estimaciones
futuras al
respecto establecen que la disponibilidad se irá reduciendo conforme se vaya incrementando la
demanda.
Por ejemplo, se proyecta que del año 2000 al 2030, se reducirá la disponibilidad hasta en casi 1000
m3/hab/año [2].
Bajo este marco, el tema del agua toma su respectiva relevancia debido al futuro que se
prevé
en donde los modelos de predicción de cambio climático establecen que en la región Paso del Norte
[PdN]
(Cd. Juárez, Chih., -El Paso, Tx-Las Cruces NM) las lluvias serán escasas y las temperaturas se
pudieran
incrementar substancialmente por encima de los promedios normales; aunado a esto, el incremento de
las
demandas por el recurso para cubrir las necesidades de una población en expansión se presentará en
constante aumento debido a la tasa de crecimiento poblacional. Por otro lado, el Monitor de la
Sequía
(https://smn.conagua.gob.mx/es/climatologia/monitor-de-sequia/monitor-de-sequia-en-mexico
registra una
sequía en expansión territorial continua en todo el país, acentuando las clasificaciones de “sequía
severa” en el territorio de Chihuahua, sosteniéndose durante todo lo que va del año 2023. Esto
presiona
en las disponibilidades de agua superficial en las represas del Estado de Chihuahua y subterránea de
los
diferentes acuíferos de la región, generando conflicto y problemas sociales que son utilizados
generalmente con fines políticos por encima de los intereses de lo social-ambiental-económico [3].
En este artículo, se estarán revisando datos concretos respecto a la disponibilidad de agua
subterránea en la región PdN sustentados en publicaciones arbitradas y textos especializados en la
temática, centrando el enfoque en documentar los datos con información actualizada para generar
conocimiento general en la materia que ocupa este trabajo. Se darán antecedentes concretos
específicamente en tres áreas: 1) gobernanza en los acuíferos transfronterizos en la región PdN; 2)
estimación de volúmenes de almacenamiento de agua subterránea para los acuíferos transfronterizos
del
Bolsón del Hueco (Valle de Juárez) y El Bolsón de Conejos-Médanos-La Mesilla; y finalmente, 3) las
estrategias y retos que se tienen para el futuro del agua subterránea en PdN.
La gobernanza de los Acuíferos Transfronterizos de la Región PdN
Los recursos de agua subterránea en la frontera entre México y los Estados Unidos son binacionales por su naturaleza de formación hidrogeológica y la extensión geográfica del acomodo de sus acuíferos. Aún y cuando ha habido iniciativas puntuales al respecto del manejo de agua subterránea, ese único esfuerzo no se considera como un ejercicio extrapolable hacia las otras regiones transfronterizas en donde se ubican los 36 acuíferos compartidos entre México y los Estados Unidos quedando pendiente la agenda de un tratado internacional de agua subterránea entre México y los Estados Unidos [4,5]. En el caso particular de la distribución, acomodo de los acuíferos que almacenan el agua subterránea en la región PdN y su administración, es conocido y ha sido documentado ampliamente que la meta de la gobernanza binacional del agua subterránea implica complejos acuerdos diplomáticos para su administración, manejo y explotación que, a la fecha del presente trabajo, no se tienen acordados a nivel de gobierno central entre los dos países debido a la falta de caracterización física de su extensión territorial y de su volumetría [6,7]. En el caso de la extensión geoespacial subterránea de los paquetes sedimentarios que componen los acuíferos en la región PdN, su distribución entre los dos países en donde se pueden observar “trasvasando” el límite geopolítico entre los dos países se presenta en la Figura # 1.
Volumetría y distribución de agua subterránea en la Región PdN
La profundidad y extensión tridimensional de los acuíferos de la región PdN es ampliamente conocida y los volúmenes de agua disponible en ellos también ha sido documentada. De igual manera, se ha datado el tiempo de residencia (edad del agua) en los acuíferos y se ha medido su equilibrio (balance hídrico) entre lo que se extrae de ellos y lo que recarga por efecto de las lluvias de la región, el riego agrícola o las fugas en el sistema de distribución de agua potable. Por ejemplo, se ha documentado a través de medios de exploración geofísica la profundidad de los acuíferos del Bolsón del Hueco (Valle de Juárez) reportando un “doble” paquete sedimentario conocido como “acuífero somero” con poco más de 70 m de espesor; seguido de capas intercaladas de material permeable y semipermeable con más de 3 000 m de profundidad al basamento (roca sólida impermeable) conocido como acuífero semi-confinado [8]. Por otro lado, se ha reportado en el acuífero de Conejos-Médanos-La Mesilla grandes volúmenes de agua, los que pudieran llegar a ser potencialmente recuperables con calidades que varían de agua dulce a ligeramente salobre (presencia de sal en el agua) y que ha sido estimada en 82 600 hectómetros cúbicos (hm3) en la parte estadounidense de la cuenca y 69 100 hectómetros cúbicos en su porción mexicana [1 hm3 = 1 000 000 m3] [9]. Sin embargo, también se conoce que en la región PdN y en este acuífero en particular, la recarga por efecto de la precipitación y riego es prácticamente nula indicando que el agua subterránea en este acuífero no es reciente y que se recargó hace miles de años cuando el clima era más húmedo [10].
Estrategias y retos para la sustentabilidad de acuíferos en la región PdN
Los retos para la sustentabilidad hídrica de los acuíferos en la región PdN son enormes y de grandes
complejidades. Por un lado, tenemos la distribución geográfico-espacial de los acuíferos en
cuestión,
con la particularidad de ser transfronterizos en su origen y formación lo que implica la necesidad
de
acuerdos bilaterales que no siempre son fáciles de conciliar. En segundo término, se tienen los
marcos
jurídicos que gobiernan dichos recursos en cada uno de los países en donde; por el lado mexicano, se
cuenta con una ley que gobierna las estructuras administrativas para lograr la sustentabilidad del
recurso (LAN) en donde el empoderamiento social se distribuye en base a los consejos de cuenca que
están
representados por todos los usuarios del recurso que se localizan dentro de la cuenca. Por ejemplo,
para
el caso de la región PdN, el Consejo de Cuenca Río Bravo (https://www.cuencariobravo.org/) es la
autoridad civil responsable de lograr los acuerdos entre las partes para el buen uso de los recursos
de
agua (ambos, subterránea y superficial). En su contraparte, en la sección estadounidense para lograr
la
administración del agua (ambos, subterránea y superficial) los acuerdos se rigen por marcos legales
estatales que se disputan en lo particular para la utilidad del recurso. Esto trae como consecuencia
largos procesos de conciliación entre las partes para llegar a consensos en los procedimientos para
administrar sus recursos de agua.
Otro reto clave para ambos territorios, es la necesidad de infraestructura sanitaria para
el
cuidado de la calidad del agua y para conciliar acuerdos binacionales holísticos en donde se
discutan
estrategias en conjunto a través de talleres informativos y colaborativos en donde se contienden las
estrategias y se analizan los datos de la situación actual del recurso. Por ejemplo, Mayer y otros
colaboradores [11], realizaron un ejercicio de empoderamiento social binacional llamado “Juegos
Serios”,
los cuales aplicaron técnicas de colaboración participativa empática para “ponerse en los zapatos”
de
las contrapartes. En este ejercicio encontraron que las partes representativas de ambos países
estuvieron de acuerdo en que el escenario de “seguir haciendo lo mismo” con respecto al uso del
agua, no
era sustentable. Aún, sin embargo, cuando se trató el tema de quien debería de reducir sus
extracciones
del acuífero para ayudar en la preservación del recurso no renovable, no se logró consenso entre las
partes pues ninguna de las agencias participantes y los representativos comunitarios de ambos países
estuvieron dispuestos a reducir el volumen comprometido para sus respectivas comunidades.
Estos talleres demostraron que las comunidades están conscientes de la importancia del
recurso
de agua subterránea; sin embargo, se requiere de una continuidad de concientización hacia las
sociedades
de ambos países para ir informando y educando a la ciudadanía para avanzar en la agenda de la
sustentabilidad hídrica binacional.
Conclusiones
En este artículo se revisó el tema de los acuíferos transfronterizos que se localizan en la región
PdN.
En esta región, la disponibilidad de agua subterránea es clave para el desarrollo social, económico
y
ambiental pues es el recurso inmediato que se encuentra con posibilidades de ser aprovechado de
manera
sustentable considerándose más importantes y por encima de las prioridades que pudieran tener las
represas que almacenan agua superficial y que existen localizadas en territorio estadounidense, las
cuales están sujetas a diversos acuerdos binacionales para su usufructo y además con serios impactos
por
la recurrencia del cambio climático en la región. De igual forma, se ha demostrado que la
disponibilidad
de volumetría en los acuíferos binacionales son considerablemente grandes y que con un manejo
sanitario
adecuado y con la tecnología apropiada, éstas aguas ligeramente salobres que se encuentran a mayores
profundidades (>450 m) pudieran ser aprovechadas si se logran consensos para generar e invertir en
la
infraestructura hidráulica apropiada para la potabilización (por ejemplo, desalinización, tecnología
que
actualmente se encuentra ya funcionando en la Ciudad de El Paso, Texas en los Estados Unidos).
De igual manera, se explicó en este articulo la importancia del empoderamiento social
basado en
ciencia e información fiable que producen las universidades locales y regionales en ambos países,
pues
producen datos de relevante importancia para reducir y eliminar el síndrome del “mapa en blanco”.
Este
fenómeno de carencia de información hacia ambos lados de la frontera en donde los datos de un lado
de
los límite territoriales del país por lo general no eran compartidos a las contrapartes produciendo
este
“síndrome” en donde en la línea divisoria geopolítica de ambos países, solo se mostraban los mapas
en
blanco de ambas partes de la vecindad territorial, esto es, los mapas mexicanos de disponibilidad,
no
incluían información del lado norte de la imagen, y viceversa, los mapas estadounidenses no contaban
con
la información del lado mexicano.
Como reflexión final podemos comentar que, es de relevante importancia seguir el ejercicio
democrático de la socialización de la información técnica basada en la mejor ciencia posible y
explicada
de manera sencilla y sin tecnicismos que pudieran confundir a la audiencia. De esta forma, las
decisiones consensadas permitirán la gobernanza del recurso contribuyendo con la autoridad para
tomar
acciones clave para la sustentabilidad del recurso, en donde los acuerdos se socialicen reduciendo o
eliminando el autoritarismo que pudiera en su momento presentarse al imponer alguna acción o peor
aún,
forzar alguna decisión centralista en donde no se anticipe el acuerdo con la sociedad en su
conjunto.
Ilustraciones
Figura # 1 Extensión geográfica de los acuíferos transfronterizos en el área de estudio [12].
Referencias Bibliográficas