Impacto del diseño de mobiliario en alumnos universitarios con TDAH
Lic. Diana Vanessa Díaz Carrera
Licenciada en diseño gráfico
Mtro. Armando Martínez De La Torre
Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño en la Universidad de Guadalajara
Dr. David Cortés Sáenz
Universidad Politécnica de Cataluña, España
Resumen
En la mayoría de las aulas de las instituciones de educación superior, el mobiliario no está diseñado considerando a alumnos con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). Aunque el mobiliario se ha uniformado para todos los integrantes de una clase, las necesidades de cada persona son distintas. Para este sector creciente de la población, es complicado desempeñarse igual que otros estudiantes, ya que sus síntomas incluyen falta de concentración e inquietud constante, lo que genera una necesidad de movimiento. Este artículo aborda la problemática del mobiliario actual en relación con los alumnos con TDAH y propone cómo el diseño de producto puede ofrecer soluciones.
Introducción
El propósito del siguiente artículo es analizar cómo el mobiliario puede impactar de forma positiva o
negativa a estudiantes con TDAH y cómo el diseño puede generar soluciones innovadoras a esta
problemática.
El mobiliario en las aulas de cualquier centro educativo tiene un impacto directo en el
desempeño y
experiencia de los alumnos. Es en contacto con sillas, bancos, mesas y escritorios donde los
estudiantes pasan la mayor parte del día desarrollando sus actividades académicas.
El alumno con TDAH
Figura 2: Alumno teniendo dificultades para concentrarse.
Los estudiantes con TDAH enfrentan dificultades en aulas tradicionales, donde deben permanecer
sentados largos periodos y prestar atención en espacios poco cómodos (Figura 2). Este trastorno de
origen neurológico afecta principalmente la concentración, dificultando su desempeño académico. Si
hay síntomas de hiperactividad, el impacto puede ser aún mayor en los ámbitos social, académico o
laboral [2].
Es fundamental que los estudiantes cuenten con un entorno saludable para su desarrollo
académico.
Para diseñar soluciones adecuadas, se debe considerar la ergonomía (estudio de la eficiencia en el
entorno de trabajo) y la neuroergonomía, que analiza cómo responde el cerebro humano en distintos
contextos, como el estudio [3].
Por ejemplo, para mitigar síntomas como la hiperactividad, las personas pueden
autorregularse
sensorialmente mediante pequeños movimientos repetitivos [3].
En las instituciones de educación superior, fomentar valores como el respeto y la inclusión
impulsa
la educación. En la UACJ, se considera que para lograr el aprendizaje, las personas deben sentirse
respetadas, recibidas, acompañadas e inspiradas [4]. Para estudiantes con TDAH, es fundamental
sentirse incluidos y contar con espacios adecuados que atiendan sus necesidades.
Mobiliario tradicional
El diseño de mobiliario ha influido en cómo se llevan a cabo las actividades educativas, incluso en
la disposición del espacio y la disciplina en clase.
En muchas aulas universitarias, el mobiliario se reduce a un escritorio y una silla. Estas
sillas
tipo visitante suelen ser de polipropileno rígido con estructura de acero tubular (acabado en
pintura epóxica negro mate), sostenidas por dos barras en forma de “U”.
Soluciones al mobiliario actual
Un estudio de 2021 señala que la postura de los usuarios en los asientos varía constantemente, por lo que los diseños deberían adaptarse a esta variabilidad, incluso mientras están sentados [5]. En México, el manual “Normas y especificaciones para estudios, proyectos, construcción e instalaciones” contiene un volumen sobre diseño de mobiliario que regula mesas y asientos escolares, promoviendo posturas adecuadas (Figura 4) [6].
Conclusiones
Comprender la sintomatología del TDAH permite diseñar soluciones creativas que mejoren la experiencia
educativa de estos estudiantes. Una proporción creciente de la población universitaria se
beneficiaría de mobiliario que se adapte a sus necesidades, promoviendo mayor interacción y
comodidad.
El mobiliario debe evolucionar con los avances en ergonomía y salud mental. Un diseño
adecuado no
solo favorece a estudiantes con TDAH, sino también a toda la comunidad universitaria.
La ergonomía es clave en el proceso de diseño, ya que un mueble mal diseñado puede causar molestias
físicas y mentales. Es esencial considerar dimensiones y formas adecuadas, así como los movimientos
naturales del cuerpo humano.
El TDAH puede afectar el desempeño académico. Dificultades para concentrarse y la necesidad
de
moverse constantemente exigen entornos de aprendizaje adaptativos e inclusivos.
El mobiliario escolar es esencial para el aprendizaje. No debe imponer condiciones al
estudiante,
sino adaptarse a sus necesidades. En el pasado, se han desarrollado asientos interactivos para niños
con resultados positivos, pero se ha ignorado a los estudiantes universitarios. Hoy, más personas
con trastornos como el TDAH acceden a la educación superior, lo que invita a repensar la diversidad
en las aulas.
El uso del diseño como agente de cambio en la sociedad permite crear soluciones a diversos
problemas
del entorno de manera creativa. ¿Es entonces el diseño capaz de aportar soluciones que mejoren la
calidad de vida de las personas convergiendo con otras disciplinas?
Referencias