El síndrome de ovario poliquístico también conocido como SOP, se caracteriza por la presencia de quistes en los ovarios y desequilibrios hormonales. Afecta a la mayoría de las mujeres jóvenes, causando riesgos en su salud reproductiva; les genera periodos menstruales irregulares, dificultades para concebir y un exceso de hormonas masculinas como la testosterona. El SOP también se encuentra relacionado con otros tipos de problemas metabólicos y cardiovasculares, como la resistencia a la insulina y la presión arterial alta. Además, afecta la salud mental contribuyendo a la depresión y ansiedad.

Investigaciones recientes sugieren una clase de conexión entre las complicaciones cerebrales en la vejez y la salud metabólica y cardiovascular durante la edad adulta, como es el caso de la demencia. Sin embargo, existe información escasa sobre si las mujeres con SOP enfrentan algún tipo de riesgo al presentar estas dificultades cerebrales. Por esta razón, un estudio de la Universidad de California, San Francisco, exploró los posibles vínculos que pueden existir entre el síndrome de ovario poliquístico y la salud cerebral en las mujeres jóvenes, ya que esto podría estar involucrado con los cambios de señalización del cerebro por causa de desequilibrios hormonales, inflamación o problemas en los vasos sanguíneos. El estudio únicamente busca mostrar una relación y no garantiza que el SOP cause algún tipo de deterioro cognitivo.

Para este estudio se utilizaron datos del Estudio de Mujeres CARDIA. Este estudio forma parte de una investigación más amplia que examina cómo se desarrollan los factores de riesgo de enfermedades del corazón en personas jóvenes. En particular, se estudiaron mujeres que padecían síndrome de ovario poliquístico, caracterizado por niveles elevados de hormonas masculinas e irregularidades en los ciclos menstruales. También se incluyeron mujeres que no sufrían esta condición. Las participantes tenían entre 18 y 30 años al comenzar el estudio y fueron examinadas periódicamente durante 30 años, finalizando el estudio cuando tenían entre 48 y 60 años.

Se descubrió que aquellas con SOP presentaban un rendimiento cognitivo con un porcentaje más bajo en las distintas pruebas donde evaluaban su nivel de atención, habilidades verbales y la memoria. Además, realizaron resonancias magnéticas cerebrales donde se encontraron cambios en la materia blanca en el cerebro. La materia blanca es como el “cableado” que logra conectar distintas áreas cerebrales y permite que se comuniquen entre sí, afectando de esta manera las habilidades mentales y la conexión entre diferentes áreas cerebrales.

Gracias a este estudio se logró revelar que el síndrome de ovario poliquístico puede presentar implicaciones en la salud cerebral de las mujeres con este padecimiento. Por lo tanto, resulta importante realizar más investigaciones sobre la interconexión entre el SOP y el bienestar mental y cómo los desequilibrios hormonales y otros aspectos metabólicos pueden influir en la salud cerebral a lo largo del tiempo.

Referencias