Mucho se ha escuchado acerca del uso indiscriminado de antibióticos y su impacto en la generación de
súper bacterias. Sin embargo, ¿sabes que es la resistencia bacteriana y cómo estos microorganismos
pueden comprometer tu salud y la de tus seres queridos? Y no solo eso, ¿sabías que la nanotecnología
puede evitar el crecimiento y la propagación de éstos patógenos?
Por definición, un antibiótico es un medicamento capaz de combatir enfermedades infecciosas
en los seres humanos ocasionadas por bacterias. Sin embargo, en muchas ocasiones dichas bacterias
tienden a acostumbrarse al contacto con los antibióticos, lo que ocasiona a largo plazo un fenómeno
de adaptación que puede afectar su eficacia. A este proceso se le conoce como resistencia
bacteriana, y actualmente representa uno de los problemas más graves de salud pública a nivel
mundial, ya que, al disminuir la eficacia de los antibióticos, las bacterias se fortalecen y pueden
representar un riesgo significativo a nuestra salud (Figura 1).
Figura 1. Esquema representativo de la evolución de la resistencia bacteriana ante la
exposición de antibióticos convencionales. Elaboración propia.
Actualmente, el desarrollo de nuevas estrategias para el combate de enfermedades
infecciosas, demanda alta eficacia y la inactivación irreversible de los microorganismos en tiempos
cortos (inferiores a 1 hora), con el objetivo de imposibilitar su crecimiento y propagación. En este
sentido, la nanotecnología como área multidisciplinaria del conocimiento nos brinda la posibilidad
de diseñar, manipular, aplicar y validar materiales a nanoescala, capaces de responder ante
estímulos físico-mecánicos y biológicos, lo que marca la pauta en el desarrollo de tecnologías
innovadoras que pueden ser satisfactoriamente utilizadas en el sector salud. Una de las aplicaciones
más prometedoras en el desarrollo de nanomateriales va enfocada a la fabricación de telas formuladas
con nanopartículas, que sean capaces de evitar la sudoración y el mal olor ocasionado por las
bacterias (Figura 2). La clave en la aplicación de nanomateriales radica en que al ser tan pequeños
(1 x 10-9 metros) pueden penetrar con facilidad a las bacterias, dañando su estructura y modificando
su genoma, produciendo en consecuencia su muerte en un tiempo record.
Figura 2. Ilustración representativa de cómo la incorporación en nanomateriales puede
mejorar la capacidad bactericida en textiles. Elaboración propia.
Durante los últimos años, en el Laboratorio de Nanomateriales Antimicrobianos del Centro de
Investigación y Desarrollo Tecnológico en Electroquímica (CIDETEQ), nos hemos dado a la tarea de
diseñar nanomateriales capaces de inhibir el crecimiento de bacterias y virus, tomando en cuenta el
uso de tecnologías verdes para la fabricación de nanopartículas antimicrobianas. Algunos ejemplos de
ellos son la fabricación de apósitos de heridas [1], la incorporación de las nanopartículas en cubre
bocas [2], o en el desarrollo de membranas capaces de ser utilizadas en sistemas de filtración [3].
El fundamento de la síntesis verde de nanomateriales radica en que se evite el uso de agentes
tóxicos a la salud y que representen un impacto ambiental, además de buscar procesos de síntesis de
bajo costo, aprovechando los recursos naturales [4], tales como los de frutas, plantas e incluso
residuos, con el objetivo de generar materiales funcionales de fácil acceso a la comunidad.
En la Figura 3 se puede apreciar cómo durante la fabricación de cubre bocas, podemos
realizar la incorporación de nanomateriales antimicrobianos, los cuales son capaces de eliminar el
crecimiento de bacterias patógenas como E. Coli y S. aureus, que son microorganismos causantes de
enfermedades intrahospitalarias, y que además son capaces de generar resistencia bacteriana. Con lo
anterior, lo que se busca con el uso de nuevos materiales basados en nanotecnología es que se puedan
eliminar los patógenos en un tiempo de contacto mínimo, para prevenir los mecanismos de resistencia
bacteriana. ¿Te imaginas si logramos prevenir el desarrollo de microorganismos y que, por lo tanto,
disminuyamos la propagación de enfermedades infecciosas? Este es el verdadero reto…
Figura 3. Esquema que representa la fabricación de cubre bocas a partir del uso de
nanomateriales antimicrobianos. Elaboración propia.
En el área de investigación de nanomateriales antimicrobianos, los retos actuales en el
diseño de nuevos materiales van enfocados al establecimiento de una plataforma multifuncional. Esto
significa que no solo se requieren materiales antibacteriales, si no que a la par sean capaces de
evitar o inactivar el crecimiento de virus, hongos e incluso parásitos. Para tal efecto, se busca
que las propiedades intrínsecas de los nanomateriales sean transferidas a diferentes polímeros, con
la capacidad de fabricar pinturas, textiles y recubrimientos inteligentes, que eviten ser áreas de
contacto y transmisión de enfermedades. ¿Te imaginas si dentro de los hospitales, el transporte
público o los sanitarios se integrara esta tecnología y pudiéramos contar con superficies
autolimpiables? Hacia allá vamos…
Finalmente, hay mucho camino por recorrer. En el grupo de nanomateriales antimicrobianos de
CIDETEQ creemos que la clave en el desarrollo de dichos sistemas radica en la combinación
multidisciplinaria de conocimientos, en donde los estudiantes tienen la capacidad de explorar sus
ideas y aplicarlas en el desarrollo de diferentes materiales, que busquen mejorar la calidad de vida
de la población. Para llegar a ello, es indispensable escuchar y atender las necesidades actuales de
la sociedad, con el objetivo de solucionar problemas reales, ¿crees que podamos llegar a ello?
Referencias
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